Una operación militar conjunta entre fuerzas afganas y de la OTAN, está logrando sacar a los guerreros talibanes de sus bases en la provincia de Helmand.
En el tercer día de la Operación Moshtarak, oficiales afganos dijeron que las áreas alrededor de Marjah y Nad Ali estaban siendo libradas de los insurgentes.
Sin embargo, las fuerzas estadounidenses inmersas en Marjah estaban siendo ralentizadas por la acción de francotiradores y las bombas caseras.
La campaña tiene como finalidad devolver el control de estas áreas al gobierno de Afganistán.
En un duro revés, la operación se vio manchada el domingo por la muerte de 12 civiles por una falla al disparar un cohete aliado.
A esas víctimas se suman cinco más que fallecieron hoy en un bombardeo que se llevó a cabo en la provincia de Kandahar, en otras maniobras ajenas a la Operación Moshtarak.
Según el Brigadier General afgano Mohammad Zazai, ya han dominado a una buena parte de los rebeldes, quienes no habrían demostrado mucho movimiento hoy.
«Están muy débiles al sur de Marjah, otorgando poca resistencia, así que pronto habremos librado el sector de cualquier amenaza enemiga», agregó.