Al menos 41 personas murieron y 106 fueron heridas en la explosión de una mujer-bomba en el noreste de Bagdad.
La mujer detonó un chaleco explosivo entre un grupo de peregrinos que se dirigía a Karbala, a 80 km de Bagdad.
Los religiosos chiítas celebran Arbaeen, el fin del simbólico duelo de 40 días por la muerte del nieto del Profeta Mahoma.
Un testigo dijo ver una gran bola de fuego y a los peregrinos pedir ayuda mientras se tendían en el suelo.
Muchos ayudaron a los afectados llevándolos al hospital en automóviles, en vez de esperar las ambulancias.
La seguridad ha sido aumentada en torno al sagrado altar de Imam Hussein, que culmina la larga ceremonia este viernes.