Una vez más, la “verdeamarela” nos deja fuera en esta instancia, despertándonos del sueño de seguir avanzando en una cita mundialera.
En una rotunda derrota de 3-0, La Roja se despidió del Mundial de Fútbol de Sudáfrica 2010, tras perder frente a Brasil, en octavos de final. Los mismos verdugos que nos dejaron fuera en Francia 1998, en esta misma instancia.
De esta manera, se rompió el sueño de seguir avanzando, lo que no se da desde el Mundial de 1962, en que la escuadra chilena de ese entonces logró un tercer lugar en casa.
Desde la clasificación a Sudáfrica 2010, como segundos en la tabla después de Brasil, que crecieron las expectativas con esta selección, más aún respaldada con el buen trabajo realizado por el técnico argentino Marcelo Bielsa.
Quedamos en el grupo H, junto con España, Suiza y Honduras. Partimos con dos triunfos y un buen juego -ante los catrachos y los helvético- que no había logrado una selección chilena, hace casi medio siglo, en una cita mundialera.
Aumentaban las ilusiones, ahora venía España, sólo bastaba un empate para pasar a segunda vuelta como primeros del grupo. Pero, por un par de errores de los chilenos, perdimos por 2-1. Clasificamos, pero segundos en el grupo y ahora nos tocaba con los mejores: los pentacampeones.
Pese a ser considerada la mejor selección del fútbol del mundo, igual habían esperanzas de doblarle la mano a la historia y vencer por primera vez a la “verdeamarela”. Este cuadro nacional era distinto, con mentalidad ganadora y una propuesta ofensiva, nunca antes vista en una selección chilena de fútbol. Por eso, es que soñamos con pasar a cuartos de final, venciendo a los mejores.
Pero una vez más, los brasileños nos despertaron y, en esta ocasión con tres goles que dejaron helados a todos los hinchas de La Roja.
Chile entró con una formación que no había mostrado hasta el momento, sin un creador en medioterreno y un sólo delantero, el recién recuperado Humberto Suazo.
El duelo comenzó parejo, los nacionales defendían bien y no dejaban crear a sus contrincantes en el mediocampo, cosa que desespera a los brasileños.
Pero la experiencia y calidad para estructurar de los pentacampeones les daría el primer gol en el minuto 35, con un cabezazo del central Juan, tras un tiro de esquina. Cuatro minutos más tarde llegó el segundo, por parte de Luis Fabiano, en un rápido contragolpe.
En el segundo tiempo hubo cambios en La Roja, que esta vez vistió de blanco, entre ellos la entrada del “mago” Valdivia”. Por su parte, la “verdeamarela” jugó esperando a los chilenos y cerró el partido a los 62 minutos con el tercer gol, un toque de derecha de Robinho.
Luego Brasil comenzó a sacar a sus mejores hombres para guardarlos a cuartos de final. Cedió algo de espacio a los nacionales, pero no pudieron anotar para el descuento. La única opción clara fue un tiro frontal de Valdivia a los 67 minutos.
Así, Chile dice adiós a este Mundial, guardando las esperanzas para cuatro años más. Ahora falta ver qué pasará con este grupo de guerreros y si seguiremos contando con el serio trabajo del DT Marcelo Bielsa.