Las exportaciones chinas aumentaron un 17,7% en diciembre, al parecer desplazando a Alemania como el mayor exportador del mundo.
La subida, comparada con el año anterior, acaba con un descenso de 13 meses originado por la crisis global.
Según algunos medios, estas cifras llevarán a una demanda internacional para que China re-evalúe el yuan.
El año pasado se vio una disminución constante de su comercio, mientras la crisis económica disminuía la demanda por sus productos.
Pero en las últimas semanas del año, la mejora fue mucho mejor de lo pronosticado por los expertos, llegando las exportaciones a los $130 billones de dólares.