Por Gabriela Garnham, gerente general de la Asociación de Dispositivos Médicos de Chile, ADIMECH.
Con la pandemia del coronavirus avanzando en nuestro país, ya en Fase 4 y la declaración de Estado de Catástrofe, ha surgido la preocupación pública por la atención de los casos graves de contagiados por el COVID-19. Situación donde los dispositivos médicos se convierten en elementos claves para un adecuado manejo de los pacientes, como por ejemplo la llamada “Cama UCI”.
La “Cama UCI”, más que solo una cama clínica, consiste en un espacio de estricto monitoreo de la condición de una persona en estado crítico. Además, contempla la ventilación mecánica si se presenta insuficiencia pulmonar, una de las complicaciones complejas de COVID-19. Junto con ello, para su adecuada operación son necesarios también profesionales de la salud capacitados para atender estos pacientes.
Recordemos que no es la primera vez que el sector de los dispositivos médicos se enfrenta a una crisis sanitaria. Desde el SARS en 2002 hasta los brotes de ébola en 2013 y 2018, la tecnología médica ha estado a la vanguardia para combatir y contener brotes de enfermedades, por lo que desde siempre se ha tomado muy en serio su rol en el desarrollo y distribución de dispositivos médicos para los pacientes de todo el mundo.
En este sentido, como asociación gremial que reúne a las empresas de dispositivos médicos más innovadoras de nuestro país, declaramos nuestra disposición a colaborar frente a la situación que estamos viviendo. Así, nos encontramos atentos a las instrucciones de la autoridad frente al reciente anuncio de Estado de Catástrofe, en específico a los procedimientos para asegurar la cadena de abastecimiento expedita a las instituciones de salud, así como el soporte técnico y clínico cuando las organizaciones así lo requieran.
Salir adelante y superar esta crisis sanitaria depende del compromiso de todos. Las asociaciones gremiales de dispositivos médicos, a través de sus socios con un intenso trabajo, están buscando responder a todos los ciudadanos, en especial a los trabajadores de la salud y los gobiernos, tanto en Chile como en el resto del mundo.
Comunicado de prensa:
Lorena Bustos
labcomunicacion.cl
