Los servicios públicos y de transporte de Grecia se han detenido mientras sus trabajadores realizan una tercera huelga masiva en protesta por las austeras medidas del Gobierno.
Los vuelos están suspendidos y la mayor parte de los colegios y hospitales cerrados, durante una marcha de 24 horas, convocada por dos grandes sindicatos.
La policía disparó gas lacrimógeno a quienes tiraban piedras durante la protesta, la cual se realizó en la capital Atenas.
El Gobierno dijo que simpatizaba con la molestia pública por el aumento de impuestos y los recortes en los sueldos, pero sentenció que no cederá.
El país tiene actualmente un déficit público de 12,7%, cuatro veces mayor de lo que permiten las reglas de la Eurozona.
El Gobierno afirmó que lo reducirían a un 8.7% este año y que también disminuirá la deuda nacional de sobre $400 mil millones de dólares.
Esto lo lograrían, recortando los sueldos en el sector público, aumentando el promedio de la edad de jubilación y aumentando los impuestos a las ventas.