Enviados del exiliado líder espiritual, el Dalai Lama, están en Pekín para retomar las negociaciones con el gobierno chino tras un quiebre de 15 meses.
Las discusiones tuvieron una amarga interrupción en 2008, con afirmaciones chinas de que no se ha logrado ningún progreso.
Uno de los representantes del Dalai Lama dijo que esta nueva negociación podría significar un cambio en la apertura de Pekín, aunque aún no exista evidencia concreta de ello.
Las relaciones entre ambas naciones, que nunca han sido buenas, se vieron empeoradas por tensiones en zonas tibetanas en 2008.
Ésta será la novena vez que se establecen discusiones entre ambos gobiernos desde el exilio en 2002 del Dalai Lama, quien ahora reside en India.
Según un comunicado del líder espiritual del budismo tibetano, sus cinco representantes deberían regresar en febrero, ojalá con un avance en las relaciones.