Los últimos campeones de Europa habían llegado como uno de los favoritos para ganar la Copa mundialera, pero decepcionaron con su juego.
Sin duda, que Suiza dio la primera sorpresa de este Mundial, imponiéndose por 1-0 frente a la selección española, una de las favoritas para ganar la Copa.
Después de 18 enfrentamientos los helvéticos vencieron por primera vez a los hispanos, gracias a una afortunada jugada que remató Gerson Fernández, a los 55 minutos. Esto le bastó para compartir el liderato del grupo H con Chile.
El juego de los españoles estuvo muy lejos de su nivel, ansiosos y sin poder romper el muro de sus contrincantes, por lo que ahora deberá ganar sus dos partidos si quieren pensar en una clasificación.
El rigor táctico y el orden en el campo de los jugadores suizos se impuso a la calidad y la técnica de los rojos que se estrellaron, una y otra vez, contra el muro defensivo planteado por Ottmar Hitzfeld.
Suiza no se amilanaba, jugaba al contraataque y ponía en aprietos a una insegura defensa española. El descuento de cinco minutos se hizo interminable y el pitido final desató la euforia en el equipo suizo y en los aficionados presentes en Durban.
Ahora Chile, además de vencer a los suizos, deberá sumar puntos ante España o esperar que Suiza no le gane por una buena ventaja a Honduras. Pero si La Roja sigue jugando así, sólo dependerá de ella para clasificar.