Amnistía Internacional ha solicitado a Cuba que libere a todos sus prisioneros políticos tras la muerte de un activista en cautiverio debido a una huelga de hambre.
El cubano Orlando Zapata Tamayo murió en un hospital en La Habana el martes, tras 85 días de rechazar la comida.
El organización dijo que su muerte era «una horrible ilustración de la desesperación» en torno a los detenidos políticos en la isla.
El hombre de 42 años fue arrestado en marzo de 2003 en una operación en contra de activistas de la oposición.
Zapata fue declarado un «prisionero con consciencia» por Amnistía Internacional, debido a que su protesta era en contra de las condiciones en que vivían los reos.
El hombre, encarcelado por rebeldía y supuesta una conspiración junto a Estados Unidos, acusaba a los guardias carcelarios de abusos y golpizas contra los prisioneros.