La trágica muerte del niño de 5 años en la tienda Easy de Quilicura tiene indignados a sus padres quienes piden justicia y que la empresa asuma que no tenía los mecanismos de seguridad que correspondía.
Según la empresa, el menor Ignacio Jauffret, habría subido a un rack de una altura de 2 metros aproximadamente. Ellos habrían alertado a los padres y cuando ellos intentaban sacarlo de ahí, las vigas se desprendieron cayendo sobre el menor, ocasionándole la muerte.
Según el padre, el menor nunca subió a ninguna parte.
«Yo estaba envolviendo las planchas de zinc con el guardia cuando sentimos el golpe. Él (Ignacio) se apoyó y cayeron todos los palos encima. Luego me mandaron en un taxi al Hospital del Trabajador donde no me atendieron porque es un recinto para trabajadores y luego me derivaron al Roberto del Río, pero mi hijo ya iba con derrame interno», afirmó el padre.
La familia declaró que en los próximos días presentarán una querella por cuasidelito de homicidio en contra de quienes resulten responsables.