A pesar de las quejas de diversos clubes por la ganancia de Unión Temuco de los excedentes de CDF, al ser recién llegado a la Primera «B», Harold Mayne-Nicholls defendió al equipo de Marcelo Salas, afirmando que cumplían con los requerimientos.
El «Matador» llegó a conversar con el supervisor del fútbol chileno, quien le reiteró que su club cumplía con los documentos adecuados y las mil UF para afiliarse a la ANFP.
El último paso para que un equipo amateur se vuelva profesional, es la aprobación en el Consejo de Presidentes, momento en que por votación se decide si el postulante asciende.
A pesar de que existían ciertos malestares por las ganancias recibidas por los temucanos, la presencia de Marcelo Salas como oyente en la reunión, parece haber ayudado a cierta flexibilidad, pues Unión Temuco fue finalmente aceptado.
Con respecto al detalle del conflicto, de acuerdo a lo informado por el Canal del Fútbol, son $17,5 millones de pesos para cada equipo de Primera «B», cantidad que algunos clubes sentían que no debía recibir quien recién ascendía.