El estadounidense Tiger Woods parece haber visto la luz al final del tunel y con una soberbia demostración este domingo, ganó el torneo Chevron World Challenge de golf disputado en Thousand Oaks, California, su primer triunfo en dos años.
Woods no había alcanzado ningún cetro desde fines de 2009, antes del escándalo que desataron sus infidelidades matrimoniales en 2010.
Este domingo, en el campo de par 72 del Sherwood Country Club, Woods jugó bajo presión la última ronda y con dos importantes birdies en los hoyos 17 y 18 borró el déficit de un golpe con que cerró la víspera, para firmar tarjeta final de 69 impactos y acumulado de 278.
El ex número uno del mundo, que llevaba veintiseis torneos sin saborear la victoria desde su crísis personal y los cambios que hizo en su mecánica para golpear la pelota, superó por un impacto a su compatriota Zach Johnson, campeón del Masters de Augusta de 2007.
«Se siente muy bien», dijo Woods, quien dejó escapar un rugido cuando su putt de dos metros cayó en el hoyo final para marcar el birdie (un golpe por debajo del par) con el que dejó en segundo puesto a Johnson, el primero en estrechar su mano para felicitarle.