Tras salir sexto en el Grand Prix de Bahrain, Michael Schumacher afirmó que no esperaba volver a su ritmo inmediatamente, tras su esperado retorno a las pistas.
El siete veces campeón mundial, en su primera carrera oficial desde que abandonó el deporte en 2006, tuvo un modesto regreso, calificando en la séptima posición y terminó la carrera dos puestos detrás de su compañero de Mercedes, Nico Rosberg.
Pero indiferente de las expectativas causadas por su impresionante trayectoria, el alemán insistió que nunca creyó que retomaría el ritmo desde el principio.
Sin embargo, dijo haber quedado bastante satisfecho con su rendimiento de ayer.
Schumacher escribió en su sitio web: «con respecto a mi estado físico, la carrera no me fue difícil y no terminé muy cansado al finalizarla; esto es en parte debido a los neumáticos, que en este calor no permiten mayor velocidad».
«Sin embargo, debo agregar que estoy muy, muy contento con el resultado, considerando que llevaba tres años sin práctica y no tuve mucho tiempo para prepararme», explicó el ídolo alemán.
Lo único que lamentó Schumacher fue no alcanzar a hacer su cábala preferida, dormir una siesta justo antes de la carrera.
«Llegué muy tarde al garage y tuvimos que comenzar con las preparaciones del automóvil para la carrera», dijo el piloto de Mercedes.