Al arribar a la capital nortina un comité -no precisamente de autoridades- esperaba al Presidente Sebastián Piñera.
Un centenar de personas acudieron a protestar contra los varios proyectos mineros que amenazan con contaminar las aguas de la zona norte de la patria.
El alegato tuvo lugar en las afueras del ex edificio Aduana, donde el Mandatario arribó en el marco de la celebración del Bicentenario.
El argumento principal del grupo de ciudadanos era la contaminación de las aguas, sobre todo del Parque Nacional Lauca.
A su vez, se sumaron los trabajadores públicos de la ANEF para protestar por los despidos masivos de funcionarios, que se registraron al momento que Piñera asumió el poder.
La manifestación se originó por «las mineras en el parque Lauca, por los mapuches, por los contaminados por plomo en Arica»,señaló un vecino de la ciudad.
«Quieren erradicar a tres poblaciones en Arica para colocar una termoeléctrica en Cerro Chuño y el ISP está diciendo que todos están sanos», pero entonces «¿por qué nos quieren erradicar?», reiteró.
Por su parte el Presidente de la República dijo «Quiero decirles a todos ustedes, al intendente, al alcalde y a los parlamentarios, que nuestro Gobierno tiene un compromiso muy especial con la provincia de Arica, la provincia de Parinacota y la nueva región de Arica y Parinacota».
«Por muchas razones: porque nunca más queremos ver los crespones negros en las calles y en los postes de la ciudad, porque es una ciudad que ha sido postergada y, además, porque tiene una importancia estratégica para nuestro país», puntualizó Piñera.