#Noticias color sensualidad en Miami: la pintura de Astrid Algayaga en Miami, Cuba y Madrid
Por Marcel Socías Montofré, alguna vez corresponsal y poeta en El Candilejas
Mi amiga Astrid pinta. En Miami, Madrid, La Habana y hasta Santiago en Santiago de Chile. Pinta con Marilyn y Chaplin. Es buena amiga. Una gran amiga de La Habana y pinta buenas opiniones. Como la de Henry Ballate, profesor de Historia del Arte en Madrid España. Cubaencuentro. Porque nació en La Habana y vive en Florida. Flores pinta. Se expresa en color y a mujer. Moderna. Pasión y obra aplaudida por los maestros Noel Santiesteban, César Beltrán, Tomás Esson y Sergio Payares. Ese es su abrazo en Facebook y pintura con imbolismo ancestral, gentil expresionismo abstracto.
Por eso. Porque Astrid pinta y también es poesía. Con luz y cariño expuesto en Art Emporium Gallery, Miami; The House of Movement, Miami; BeArt Series, en honor a la mujer “Miradas de Mujer”; Taller Santiesteban Print Schmidt, “La Puerta Número7”; French Connection”, Miami Beach; Iván Galindo Gallery, Miami; Artopia Art Center, Naomi Silva Gallery, Atlanta, Georgia.
Y por el sur también pinta. Algunas de sus obras han sido reconocidas por el Museo Nacional de Bellas Artes de Chile. Porque se lo merece y es amiga y es poeta visual.
“Astrid Alcayaga posiciona su trabajo como “sin género”, elaborado a partir de una técnica desarrollada por Jackson Pollock. Sus abstracciones líricas son impresionantes para la vista y su influjo es inconfundible. Una amplia variedad de interpretaciones figurativas se pone de relieve a lo largo de su extensa obra, pero siempre bailando alrededor o dentro de lo abstracto. Otras mujeres en el movimiento del expresionismo abstracto emplearon la abstracción figurativa como un puente; sin embargo, para Astrid la abstracción figurativa es su fundamento y estilo”, comenta Henry Ballate, profesor de Historia del Arte en Madrid, España.
Astrid pinta y resulta imposible soslayar su colección “Los Caminos de Lola, 2007-2014”. Tentación en color y palabras para saludarla y escribir de mano y cariño propio por sus pinturas:
Voy a plantar en tu tierra fértil
enhiesto pino…
recogeré esos frutos sinceros
al momento de
saberte el mejor
jardín de mi vida…
aquel que en presencia has sido
y que hoy en recuerdo eres
como ambrosías de terciopelo…
Me dedicaré a la cosecha
de tu imagen en mi memoria,
vendimiaré el fruto
de tus jugos más secretos…
aquellos que
por su gracia llegué
a rozar el cielo…
Muéstrame tu flor,
ábrela para mí y deja
que una vez más
toque tus pétalos
donde nace la vida
y el paraíso prometido,
los suspiros entrecortados,
el misterio del azar,
el abismo insondable
de la existencia,
el placer en forma de rosa
y de tus labios afortunadamente conocidos…
Quiero ser otra vez el colibrí
que polinice
todo tu jardín florido…
Por eso abriré
la puerta de mi manantial
y te regaré de vida
con felicidad de
alelíes…
Invadiremos el mundo,
sembraremos el deseo
germinarán las flores
y sabremos que aún es tiempo
en abrir Ventanidades…
Siempre aún es tiempo
de conocer
y reconocer
de eres y serás
mi trébol de cuatro hojas…
la suerte
de que alguna vez
me hayas aceptado
luego de toda
una vida previa
y posterior
en que te he buscado
y te sigo buscando
en cada trazo y color
de “Los Caminos de Lola, 2007-2014”…
P.D. Sin duda Astrid Alcayaga pinta y también inspira. Sus musas también se comparten en #Ventanidades.