El ganador del concurso «El mejor trabajo del mundo» Ben Southall, sufre tras ser picado por un animal venenoso en aguas del Pacífico.
A sólo días de terminar su turno de seis meses como cuidador de la Isla Hamilton, ubicada en la costa de Australia, Southall fue atacado por una medusa tipo irukandi.
La diminuta medusa que mide sólo dos centímetros y por su transparencia es muy difícil de notar, son extremadamente venenosas y normalmente llevan a la hospitalización.
Según informó en su blog, el cuidador disfrutaba de una sesión de esquí acuático con unos amigos y al estar saliendo del agua, sintió un aguijonazo en su brazo derecho, lo cual en media hora se convirtió en los primeros síntomas.
«Me sentía acalorado y sudoroso, con un gran dolor de cabeza , dolores en la parte baja de mi espalda, el pecho apretado y una tremenda presión arterial» contó Southall.
Afortunadamente, pudo ser tratado a tiempo antes que los síntomas más serios se presentaran, recibiendo inyecciones que disminuyeron el dolor y causándole el sueño tras un rato.
El joven dice haber aprendido la lección, pues las autoridades recomiendan que cualquiera que entre en las aguas del Gran Arrecife entre octubre y mayo, debe hacerlo con un traje de buzo a cuerpo completo.
Southall completa su contrato el 31 de diciembre, pero se mantiene como embajador de turismo por otros 18 meses, promocionando alrededor del mundo la zona en la que trabajó.