El acuerdo consiste en aumentar las tasas de tributación y disminuir los años de invariabilidad. Además, se va a crear un Fondo de Inversión y Reconversión Regional, que recibirá a razón de 100 millones de dólares por cada año de recaudación
A los proyectos de minería ya existentes se les aplicará una tasa de tributación entre el 4 y 9%, hasta el 2012, en lo que se llamó «período de transición». En cuanto a los proyectos nuevos, se les aplicará un impuesto entre el 5 y el 14%.
A esto se suma la creación de un Fondo de Inversión y Reconversión Regional, que recibirá 100 millones de dólares por cada año de recaudación. Después de 4 años el fondo será financiado vía presupuesto. Los recursos se distribuirán a nivel nacional, pero un tercio corresponderá sólo a las regiones mineras.
El presidente de la Democracia cristiana, Ignacio Walker, valoró el acuerdo: «así se construye nuestro país, solo sobre la base de grandes acuerdos es posible llegar ha hacer un país desarrollado no podemos seguir con esta practica de tratar de buscar un votito por aquí otro por allá (…) que al final no logran generar reglas del juego claras y estables para el futuro de nuestro país».
Mientras que Camilo Escalona, presidente de la comisión de Hacienda y senador del PS, afirmó que «es para el país considerablemente mejor este régimen permanente, todos estamos de acuerdo que la minería debe tributar más y eso será realidad desde el año 2018».