Los años pasan y nos vamos poniendo viejos. Tal como el estribillo de la popular canción parece pensar el presidente boliviano, Evo Morales, luego de celebrar su cumpleaños 50.
En la celebración, el Mandatario altiplánico compartió un pastel con escolares y padres de familia de una barriada en La Paz, en un día repleto de actividades oficiales que no tenían que ver con la celebración.
Morales comenzó su jornada con la inauguración del pago de un bono escolar equivalente a 28 dólares anuales a niños de escuelas públicas del país con recursos de la renta petrolera, momento en el que recibió múltiples saludos.
El Presidente, que también se encuentra en campaña electoral para las elecciones generales del 6 de diciembre, aseguró que cumplir 50 años ya no es razón para festejar, sino que es algo preocupante.