Después de varios intentos en otros mundiales, los hispanos de una vez por todas pudieron levantar la copa, tras derrotar en la final a Holanda por 1-0.
Los españoles están de fiesta. Por fin son campeones del mundo, dejando atrás el título de eternos favoritos, para quedarse con la corona del 19° mundial de fútbol.
De esta manera, el famoso pulpo “Paul” acertó una vez más, pues predijo hace un par de días que el cuadro de Vicente del Bosque sería el nuevo monarca del fútbol.
En el minuto 116 Andrés Iniesta marcó el gol del triunfo, durante el alargue, en una apretada final ante Holanda.
Los 90 minutos del encuentro terminaron sin goles, marcado por un duro juego en medio campo y la rudeza tulipana.
Los Holandeses también pelearon a muerte la copa, pues tal como los hispanos, nunca antes habían logrado el primer lugar.
Esta era la tercera final para la “naranja mecánica”, que parecía ser la vencida, pero tuvieron al frente a los campeones de Europa, que con un excelente juego ofensivo logró la gloria.
España llegó a Sudáfrica 2010 como uno de los favoritos, no obstante, se dudó de su capacidad al perder en su debut ante Suiza y casi quedar eliminada en primera ronda si Chile le hubiese ganado, en el último partido del grupo H.
Pero se recuperaron y desde ahí no hubo más derrotas, anotando seis victorias en línea que los llevó a la ansiada final.
Esta es mejor selección de fútbol de la historia española, superando con creces sus anteriores participaciones en un Mundial. Lo más óptimo que había logrado anteriormente la “Roja” fue un cuarto lugar en 1950.
En España se vive un gran carnaval para celebrar este logro deportivo, único en ese país, y en este momento su selección está recibiendo una serie de homenajes.