Dos trenes colisionaron frontalmente en Bélgica causando la muerte de unas 20 personas, cifra que podría aumentar con las horas.
Según los oficiales de ferrocarriles, el choque ocurrió durante la hora de más alto tráfico en Halle, al norte de Bruselas.
Al parecer, uno de los trenes no vio una señal que lo instaba a detenerse, de acuerdo a lo afirmado por el gobernador de la provincia donde ocurrió el accidente.
Uno de los oficiales presentes dijo que la destrucción es enorme, mientras ayudaba a los ensangrentados pasajeros a salir de los arruinados vagones.
Ambos trenes llevaban en total a unas 250 ó 300 personas y las que resultaron con heridas leves fueron trasladadas a un gimnasio cercano para ser tratadas.
Sin embargo, algunos doctores tuvieron que actuar en el mismo lugar, realizando incluso amputaciones en el mismo lugar.
A pesar de que aún hay confusión en cuanto al número de víctimas por el desorden y las distintas declaraciones de testigos y pasajeros.
La única información oficial fue la que dio un jefe de policía local, quien concluyó que hay al menos 20 personas muertas, según recolectó de sus hombres y de los bomberos.
Pasajeros narraron el horror que sintieron al ser sacudidos por unos quince segundos durante el choque y encontrar después los cuerpos junto a las vías.
Los servicios ferroviarios hacia el suroeste de Bélgica, París y Londres fueron cancelados.