Según el gobierno británico, Peter Moore fue liberado tras dos años de ser rehén de un movimiento extremista en Irak.
La información fue entregada por el secretario de Relaciones Exteriores, David Miliband, quien agregó que el hombre capturado en mayo de 2007 se encuentra saludable y feliz de este desenlace.
Tres guardias que fueron tomados junto a él fueron ejecutados y sus cuerpos devueltos a Reino Unido durante 2009.
Un cuarto guardia, Alan McMenemy, podría aún ser un rehén de los extremistas, aunque voceros del gobierno inglés opinaron que lo más probable es que también fuera ejecutado.
Al momento de su captura, Peter Moore estuvo trabajando para la embajada estadounidense de parte de una consultora administrativa llamada Bearingpoint.
Las otras cuatro personas eran guardias de seguridad designados para protegerlo.
El grupo fue secuestrado en el ministerio de Finanzas iraquí por unos 40 hombres disfrazados de policías.
Supuestamente, pertenecen a la oscura milicia conocida como Resistencia Islámica Chiíta, que demandaba la libertad de nueve asociados, bajo arresto por fuerzas estadounidenses desde 2007.