Padres y políticos italianos están molestos con la película estadounidense Paranormal Activity tras varios episodios de crisis de pánico que sufrieron asistentes al cine.
Abrió el último fin de semana en los cines del país sin restricción etárea, a pesar de que estaba catalogada como «clase R» en los EEUU.
Según un vocero de los servicios de emergencia, el peor caso fue el de una niña de 14 años que llegó al hospital en estado de parálisis.
Además dijo que habían recibido docenas de llamados, especialmente en el sur de Nápoles, donde «varios ataques de pánico de sobre media hora ocurrieron el sábado».
La asociación italiana de padres quiere una restricción de 18 años para la película.
El ministro de Defensa, Ignazio La Russa, dijo estar preocupado por la sinopsis que mostraban en televisión, pues estaba «aterrorizando y obsesionando a los niños por la señal abierta».
Su propio hijo de siete años le hizo notar la publicidad al decirle lo asustado que estaba.
La película fue dirigida por Oren Peli con una cámara en su propia casa por sólo $15 mil dólares y recaudó US$22 millones en su primer fin de semana en EEUU.
La cinta de ficción, filmada como un documental casero, sigue la historia de una pareja que vive fenómenos paranormales en su hogar.